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El cuarteo de pinturas es una patología fácilmente identificable. Puede presentar diversos tamaños, formas y apariencias. Un caso típico se produce cuando la película presenta una amplia separación, asociada a un corte en el film, con la pintura levantada en los bordes. Otro caso de cuarteo se origina cuando se producen entramados similares y casi simétricos, similares a la piel de un cocodrilo, con pliegues de un espesor similar al de un cabello humano.
Estas pueden ser las causas que provocan el cuarteo:
• Aplicar pinturas demasiado duras y rígidas sobre películas más flexibles y blandas.
• No lijar si se superan los plazos comunes indicados entre mano y mano de pintura.
• No aplicar fondos o primers cuando se emplea de forma directa un producto de terminación, principalmente sobre madera.
• Aplicar de forma prematura tanto lacas como esmaltes o látices, sobre masillas, fondos o enduidos que todavía no hayan culminado sus tiempos de secado.
• Utilizar productos de baja calidad que no posean una buena flexibilidad y adherencia sobre los sustratos o productos que se vayan a pintar.
• Aplicar el producto final con espesores demasiado finos, en grandes extensiones o bien cuando el producto se haya diluido excesivamente.
• Aplicar productos en condiciones climáticas de muy baja temperatura y con presencia de viento, ya que esto provoca que se sequen de forma prematura tanto el látex como los productos de base acuosa.
El primer paso es quitar completamente las capas de pintura anterior que se encuentren en mal estado, hasta dejar visible la superficie original. Además, deberá llevarse a cabo el procedimiento y aplicarse los pretratamientos.
En madera: se recomienda lijar toda la superficie. En caso de que la madera sea resinosa, se deberá frotar con aguarrás mineral o bien con alcohol industrial. A continuación, emplear un preservador curador y dar una primera mano del producto transparente diluido. De esta manera se penetrará en la superficie. Finalmente, se completará con la terminación elegida: barnices o impregnantes al solvente. Para terminaciones que tengan color, se recomienda utilizar Fondo Blanco Riopint después del preservador. Finalmente, aplicar Esmaltes Riopint.
En mampostería: inicialmente se deberá chequear la aislación y la neutralidad de la superficie. A continuación, se recomienda lijar y aplicar los fijadores indicados para cada caso. Si hiciera falta rellenar imperfecciones, es necesario respetar los correspondientes plazos de secado. Por último, el trabajo debe concluirse aplicando los productos adecuados.
En hierro: si la superficie presentara óxido, este deberá ser removido por completo. A continuación se deberá aplicar desoxidante fosfatizante y pintar con fondo antióxido o bien con convertidor de óxido.
El trabajo finalizará con la utilización de los productos elegidos para la terminación. Si se emplean esmaltes multipropósito, no es necesario aplicar fondos previos.
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